"Los eventos deportivos, especialmente aquellos que hacen uso de las características naturales de nuestro planeta que están en peligro debido al cambio climático, tienen una gran oportunidad para crear conciencia sobre la emergencia climática mundial. Sylt está entre los lugares más vulnerables al cambio climático y es emocionante ver que también está a la vanguardia de la acción positiva para enfrentar este desafío. -- Niklas Hagelberg, Coordinador de Cambio Climático del PNUMA.

En 2019, en la diminuta isla alemana de Sylt, se celebró la edición más sostenible del Campeonato Mundial de Windsurf hasta la fecha. En asociación con la campaña Mares Limpios, los organizadores prohibieron las botellas de plástico y los cubiertos desechables y, una vez finalizado el campeonato, hicieron una limpieza de la playa para asegurarse de que toda la basura se retirara. Todo el material publicitario se recicló, se trabajó exclusivamente con electricidad de fuentes limpias y los patrocinadores aportaron fondos para la reforestación de manglares. El campeonato reunió en esta isla, nombrada sitio del Patrimonio Mundial por la UNESCO, a competidores de 32 países y 200.000 espectadores. 

En Sylt son muy conscientes de los peligros del cambio climático, dado que la isla está muy afectada por la degradación del medio ambiente: está perdiendo terreno rápidamente a causa del aumento del nivel del mar y las marejadas ciclónicas son cada vez más intensas y frecuentes. 

“La contaminación por plásticos es uno de los mayores problemas a los que se enfrenta el medio ambiente en la actualidad, y el deporte, como cualquier otro sector, tiene la urgente responsabilidad de ponerle freno. La guía 'Plastic Game Plan for Sport' tiene como objetivo ofrecer a las organizaciones deportivas, los organizadores de eventos deportivos, los deportistas y los aficionados al deporte orientación clara y detallada sobre cómo eliminar los desechos plásticos de su actividad y su vida cotidiana”. Marie Sallois, Directora de Desarrollo Corporativo, Marca y Sostenibilidad del COI.

En junio de 2018, el Comité Olímpico Internacional (COI) anunció su plan para erradicar los plásticos de un solo uso de la organización y sus eventos en todo el mundo, y el apoyo a la campaña Mares Limpios de parte de siete grandes cuerpos deportivos y más de 20 Comités Olímpicos Nacionales.

Los organismos deportivos que se unieron a la iniciativa para reducir los desechos plásticos incluyen la Federación Internacional de Vela, la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo, la Unión Internacional de Triatlón, la Federación Internacional de Hockey sobre Hielo, la World Rugby, la World Golf y la Asociación Internacional de Surf.

El COI ya había comenzado a reducir el desperdicio en su sede y en el Museo Olímpico, eliminando miles de artículos, y está trabajando para impulsar el uso responsable de materiales en todos los eventos, en colaboración con sus proveedores.

En enero de 2020, el COI, en colaboración con el PNUMA, presentó la guía Plastic Game Plan for Sport, en la que se ofrecen ideas sobre cómo el mundo del deporte puede luchar contra la contaminación por plásticos. También se brindan orientaciones a los organizadores de eventos deportivos para diseñar planes eficaces que reduzcan los desechos plásticos. 

“Nos tomamos nuestra responsabilidad medioambiental muy a pecho. Hemos adoptado medidas para que nuestro deporte sea sostenible y ecológico, pero todavía queda mucho que hacer. Nos sentimos honrados de que nuestro trabajo en la dimensión ambiental esté en consonancia con lo dictado por una organización internacional. Nuestros asociados cada vez están más comprometidos con la lucha contra la contaminación”. Hua Yun, Comité organizador del maratón de Xiamen.

El maratón de Xiamen lleva dos años buscando convertirse en un modelo de sostenibilidad como actividad deportiva. La carrera, que atrae a decenas de miles de corredores hasta la ciudad costera de Xiamen año tras año, se unió a la campaña Mares Limpios en 2019, lo que supuso que fuese el primer maratón en hacerlo. Ese año, los organizadores se comprometieron a reducir los desechos de plástico en un 60% a través de una serie de medidas que incluyeron reemplazar casi 1 millón de vasos de plástico de un solo uso por otros hechos de paja de maíz y prohibir las botellas de plástico desechables para evitar el desperdicio de unas 200.000 botellas que generalmente se arrojan al suelo a lo largo de la ruta. En 2020 fueron un paso más allá, haciendo que los desechos se reutilizaran o reciclaran siempre que fuera posible y colocando un contenedor para plásticos en la meta a fin de que los participantes depositaran en él todos los artículos de plástico y se reciclaran para utilizarlos en el maratón del año siguiente.